Las garrapatas en gatos se alimentan de la sangre de estos animales. Aunque habitualmente se las relaciona con los perros, también, y con mucha frecuencia, las podemos encontrar en felinos. Además, la globalización y el cambio climático están haciendo que los patrones geográficos y de estacionalidad de estos parásitos varíen, por lo que, actualmente, suponen una amenaza para la salud de todas nuestras mascotas durante todo el año.
¿Cómo saber si los gatos tienen garrapatas?
Dependiendo de la especie, tienen distintas zonas de predilección, las más comunes donde se encuentran las garrapatas adultas en los gatos son: zona dorsal, nuca, cuello (debajo del collar), espacios interdigitales, y la región de la cabeza (incluyendo las orejas). Aunque en estadios inmaduros es difícil verlas, a medida que van aumentando su tamaño se hacen más evidentes a la observación directa.
No obstante, aunque los gatos pueden tener garrapatas, en muchas ocasiones lo que percibimos son las lesiones cutáneas que producen sus picaduras. En el lugar de la picadura, se puede producir una reacción inflamatoria, costra e incluso alopecia focal (zonas sin pelo). En ocasiones, y si la garrapata no se extrae adecuadamente, pueden generarse microabscesos porque queda parte del aparato bucal del parásito en el tejido subcutáneo del animal.
Sin embargo, la mayor relevancia clínica de estos parásitos viene dada por su capacidad de transmitir agentes infecciosos que ocasionan múltiples enfermedades en animales y personas. Por ello, puede sospecharse también de la infestación por garrapatas ante signos compatibles con estas enfermedades de transmisión a través de las garrapatas, como son la fiebre, decaimiento, apatía o falta de apetito.
¿Cómo quitar una garrapata a un gato?
La retirada temprana es esencial para disminuir el riesgo de que la garrapata se haya alimentado en nuestra mascota, y por tanto haya podido transmitirle alguna enfermedad.
Antes de quitar una garrapata a un gato es muy importante no aplicar ningún producto irritante (aceite, alcohol, calor…) ya que esto puede provocar que el aparato bucal de la garrapata se contraiga, favoreciendo la regurgitación e inoculación de agentes infecciosos en nuestro gato.
En función de la especie de garrapata, la retirada podrá ser manual o habrá que emplear instrumentos específicos. De cualquier manera, la retirada debe realizarse siempre mediante una fuerza de tracción perpendicular a la piel del animal, para asegurar la retirada del aparato bucal completo. Además, se debe instaurar un tratamiento acaricida como Bravecto® Spot-On.
¿Cómo evitar las garrapatas en los gatos?
- Evitar o limitar el acceso a zonas con alta densidad de garrapatas
- Inspeccionar regularmente al animal para eliminar las garrapatas que encontremos
- Establecer pautas de desparasitación que permitan tener una protección constante todo el año.
Para este propósito, Bravecto® brinda una rápida y eficaz acción frente a las garrapatas que pueden afectar a nuestros gatos. Una sola administración tópica cada 12 semanas es suficiente para eliminar el 100 % de las garrapatas en 12 horas, lo que significan solo 4 dosis al año y menos estrés para tu gato.
Y ahora que ya sabes cómo prevenir las garrapatas en gatos, recuerda consultar con tu médico veterinario para mantener a tu mascota protegida durante todo el año.
*Indicación no válida para Chile.